La animación es una industria rica en talento, requiere de habilidades multidisciplinarias para poder crear una historia que conecte con el espectador; gracias a esto es una de las industrias favoritas del entretenimiento. Pero la animación es mucho más que sólo diversión para películas y series. Es una poderosa herramienta para las empresas.
Lo más importante para las empresas es saber comunicar su visión hacia el exterior para lograr sus objetivos.
La clave está en saber cómo transmitir el mensaje. Al pensar en eso, lo primero son las estrategias de comunicación que involucren imágenes y vídeos cortos para redes sociales debido a su gran potencial para llegar a audiencias. La animación es una de las herramientas de la publicidad que ayuda mucho a transmitir un mensaje que impacte, emocione y conecte con la audiencia. ¿Te has preguntado por qué?
Debido a que crea empatía con el espectador.
Mucho más que un vídeo. Las empresas deben de aprovechar este factor que ofrece para conectar más con sus espectadores. José Luis Martínez, fundador de la empresa CREANIMA, comenta: “la animación es un medio para transmitir un mensaje a todas las audiencias. Existen temas complejos dentro de las empresas que, al crear una producción audiovisual (grabada, con sets, personas…) deja una oportunidad de poder conectar con la audiencia de manera directa. La animación da esa oportunidad. Hace el mensaje entretenido, digerible y atractivo.”
Cada vez son más empresas que sacan a relucir el potencial que tiene una animación para publicidad dentro y fuera de éstas. Dentro del área de publicidad, ha adoptado su uso para promocionar productos y servicios así como herramienta para capacitaciones empresariales.
Con la llegada de las nuevas tecnologías, se ha evolucionado la manera de transmitir mensajes en todo tipo de herramienta y plataformas. El cambio más notable que tiene la animación es la preferencia por tecnología 3D que imitan la realidad con sus texturas, personajes y escenarios para películas y series. Sin embargo, hay tecnologías que han revolucionado el proceso clásico del bocetaje a lápiz combinándolo con tecnología 3D, y escenarios a escala hechos a mano para crear una experiencia inmersiva inolvidable al público.
La gran herramienta de la animación tiene un potencial para hacer crecer cualquier industria, incluso en tiempos de crisis como los que se vive actualmente con la contingencia COVID-19. Un consejo que nos comparte José Luis para aquellos estudiantes, emprendedores y profesionales de animación es: “Una frase que me ha motivado mucho que me dieron en un curso hace tiempo es: “en las crisis, unos lloran y otros venden pañuelos”.
Generalmente intento ponerme positivo y no dejarme caer ante adversidades como lo es esta complicada situación. Por fortuna, me están pidiendo vídeos para la crisis. Piensa positivo, y te irá positivo. Hoy en día, mucha gente quiere contar lo que está pasando, puede que sea una oportunidad para muchos y para otros es una oportunidad de otros de ser empáticos. Si estás en crisis puedes buscar alternativas y la animación puede ayudar mucho para ayudar a las empresas. “Más que nada ahorita que se ve que no se puede hacer mucho, en realidad se puede hacer todo.”